Si te preguntas cómo colocar platos de ducha de porcelana o de cualquier otro tipo, has llegado a la publicación adecuada. Hemos reunido todos los consejos más útiles para que puedas instalar un plato de ducha sobre azulejos o con el acabado que desees.
Esto es posible gracias a Decorabaño, tu tienda de accesorios de baño de confianza, donde te ofrecemos la oportunidad de cambiar completamente tu cuarto de baño por menos de lo que crees. También te ayudamos para que la reforma no te suponga un quebradero de cabeza. Pero hoy te enseñamos cómo poner un plato de ducha cerámico por ti mismo/a para que te puedas ahorrar algo de dinero.
Si crees que ya ha llegado el momento de renovar partes del baño o la estancia completa, debes saber que instalar plato de ducha sobre azulejos en vez de una bañera, va a ayudar sobremanera a medida que va disminuyendo la capacidad de movimiento cuando se llega a edades avanzadas. Con esta oportunidad podrás ganar en sencillez, seguridad y tendrás una ducha más higiénica, solo por nombrar algunas de las ventajas que tiene poner plato ducha cerámico.
Instalar un plato de ducha cerámico
Uno de los platos más conocidos actualmente por los usuarios es el plato de ducha de porcelana vitrificada (cerámico), lo que lo ha convertido en un clásico. Incluso cuando en la actualidad existen infinidad de soluciones con muy buenos resultados y acabados profesionales, además de la gran diversidad de materiales de alta calidad que existen, colocar plato de ducha cerámico dará un nuevo aspecto al baño y será una genial opción gracias a los materiales de alta calidad y las ventajas que lo hacen más durable, estético, económico y de rápida instalación.
Si quieres cambiar la bañera para colocar un plato de ducha cerámico que requiere menos atención, no tienes más que seguir cuidadosamente los pasos que te comentamos a continuación para saber cómo poner un plato de ducha cerámico:
1º Busca el tubo del desagüe
Cuando quites el plato de baño antiguo y limpies la zona, encontrarás el desagüe de la ducha en algún punto del suelo. En ese desagüe es donde deberás conectar el tubo y la válvula del plato nuevo.
2º Presenta el plato en su posición definitiva
Separa el plato unos milímetros de las paredes. A continuación, calcula la posición exacta de la válvula. Mide la distancia desde las paredes al eje de la válvula y retira el plato para posteriormente colocar la válvula en su sitio.
3º Coloca la válvula sifónica
Desmonta la parte que va por encima del plato y quédate con el cuerpo y con las juntas que van por debajo. Taladra la medida que hiciste en el paso anterior y coloca la válvula en su posición para poder instalar el tubo que va de esta válvula al desagüe. ¡No te olvides de respetar la pendiente de caída!
4º Instala el tubo del desagüe
Una buena solución sería utilizar tuberías de desagüe flexible. Primero, limpia los extremos de este tubo con un limpiador para PVC y aplícale un adhesivo especial para después unirlo al tubo de desagüe y luego a la válvula con ayuda de una junta. Antes de seguir avanzando, comprueba que no hay pérdida de agua.
5º Prepara el suelo
La parte inferior del plato de ducha va montada sobre una capa de arena y otra capa superior de cemento para poder estabilizarlo. Protege primero el desagüe con una bolsa plástica para que no se llene de arena. Luego, extiende la arena hasta la altura precisa. Por último, espolvorea una capa de cemento para fijar el plato. Presta atención, ya que existen platos de ducha que pueden requerir otro tipo de preparación del suelo, según lo que indique el fabricante.
6º Coloca el plato de ducha cerámico
Encima de la capa de cemento coloca el plato de ducha; ajusta la base del plato de ducha a ras con el conjunto y comprueba que apoye bien. Luego retira el plato y fíjate en la base. Vuelve a añadir cemento donde sea necesario y humedécelo bien. Tras haber hecho esto, ya puedes colocar el plato en su posición definitiva. Solo queda retirar el plástico de la válvula y montarla.
7º Últimos detalles
Antes de dar el trabajo por terminado, introduce la parte superior de la válvula por el hueco del plato de ducha, diseñado para tal fin. Retira los sobrantes de arena y cemento de los bordes y comprueba que los dos ángulos del plato están perfectamente aplomados para poder instalar la mampara y que no tengas problema cuando el agua del plato se vacíe completamente.
Siguiendo todos estos pasos, no tardarás en tener una bonita ducha de cerámica en tu cuarto de baño. ¡Seguro que no esperabas que fuera tan sencillo!
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