Limpiar un plato ducha de resina blanco puede ser a veces una tarea difícil. Sin embargo, son unos de los platos de ducha más populares por la asequibilidad y la facilidad de limpieza gracias a la capa antibacteriana de Gel Coat. Los principales problemas de limpieza se dan por culpa de otras sustancias presentes en el baño que pueden gotear o derramarse sin darnos cuenta y ocasionar alguna incidencia si no se limpian con rapidez.
Lo ideal si te preguntas cómo limpiar el plato de ducha de resina es pasar una esponja sin estropajo o un paño de fibra. Es una manera de blanquear el plato de ducha de resina y no dañar la capa antideslizante y antibacteriana. Recuerda, siempre sin usar productos abrasivos para conservar el plato de ducha durante mucho más tiempo.
Cómo quitar manchas oscuras en un plato de ducha de resina
Los casos extremos que van a requerir una intervención rápida por los productos presentes en el baño son, por ejemplo, cuando cae laca o esmalte de uñas. En este caso y excepcionalmente es necesario usar acetona y agua a partes iguales para conseguir eliminar la mancha sin que la capa de Gel Coat se dañe mínimamente.
Materiales
Solo necesitas un paño de microfibra o esponja suave, acetona y agua.
Acetona y agua
En primer lugar, siempre se evita el uso de químicos abrasivos para limpiar el plato de ducha de resina. Sin embargo, como en este caso, es posible que no se aclare del todo el plato de ducha. Es entonces momento de utilizar la disolución de agua y acetona a partes iguales y aplicarlo sobre la mancha. Frota suavemente con un paño de fibra para que la mezcla elimine la mancha. Cuando este proceso haya concluido puedes aclararlo todo con agua y jabón. Recuerda que si la acetona permanece mucho tiempo en el Gel Coat pueden producirse daños irreversibles.
Como puedes ver, blanquear un plato de ducha de resina es tarea sencilla, aunque siempre hay que estar atento para prevenir posibles manchas de pintauñas, acetona o productos similares.
